El Eco de Alhama número 28                                                                                                                                             Alhameños Entrañables

Cecillo López Rodríguez y
María Teresa Rodríguez Cuadra

Hablar de don Cecilio y de doña María Teresa es hablar de una historia paralela tanto en la vida como en la docencia. Un par de jóvenes de la misma edad que se conocen preparando oposicio-nes y desde entonces su vida ha transcurrido compartiendo los aspectos profesionales y también el personal. Al escribir estas líneas, nos referimos a los dos al mismo tiempo, pues no se podría escribir algo del uno sin el otro. De sus palabras deducimos que nos encontramos ante dos trayec-torias distintas, que se unen y caminan durante cuarenta años, hasta llegar juntos a la jubilación dejando tras de sí, una estela de cariño y amistad.

CECILIO "Nací en Berja el 9 de septiembre de 1947. Somos una familia pequeña, solo dos hijos. Mis padres que provenían de Granada se instalan en la posguerra en el pueblo de Berja, compran algunas tierras y se dedican a cultivar uvas. Aunque no teníamos tradición de estudiar en la familia, mis padres quisieron que sus dos hijos estudiasen.

Los estudios primarios los hice en Berja hasta los 10 años que realicé el ingreso a Bachiller. También en Berja hice los tres primeros años del Bachiller elemental. El último año y los dos del Superior los hice en Almería, interno en un colegio. Tuve la mala suerte que llegó a Berja la crisis de la uva en los años 60 y empecé a estudiar Magisterio por libre mientras daba clases particulares en mi pueblo en una academia que monté. Tenía muchos alumnos y la mayoría eran de mi edad, algunos han llegado a ser personajes públicos.

Esa fue mi vida mientras estudiaba la carrera. Termino Magis-terio y el primer destino que me dan de forma interina es Alcaudique, un barrio de Berja. Porque entonces los maestros tenían preferencia si la plaza surgía en su pueblo en plan interino. En el año 1969 decidí prepararme oposiciones y me matriculé en la academia Atalaya, en Almería. Y allí fue donde nos conocimos. Nos habíamos examinado juntos en Magisterio pero no nos conocíamos.

MARIA TERESA "Así fue como nos conocimos, yo había nacido en Alhama, el 26 de Octubre de 1947. Yo en cambio, fui hija única. No tuve hermanos. Mis padres vivían en el cortijo que hay subiendo la Cuesta de la Calera, a la izquierda, que era la casa de verano de mis abuelos. Al casarse mis padres se instalaron allí y ahí fue donde viví hasta unos años después

de casada que nos hicimos esta casa en la que ahora vivimos.

Hice mis estudios primarios con mi maestra Doña Micaela. Ella fue mi única maestra. No fui a párvulos, ni a los primeros cursos, debido a un problema de salud e ingresé directamente en la escuela, pero esto no me supuso mayor problema, pues mis padres ya se habían encargado de que aprendiese a leer y escribir. A los 10 años realicé el ingreso en Bachiller e hice los tres primeros años en Alhama también con Doña Micaela, cuando las niñas se iban a las cinco ella me preparaba a mi. Después mis padres compraron una casa en Almería donde me instalé con mi tía María que fue mi compañera todos estos años. El resto de Bachiller lo realicé en el colegio Mater Asunta de Almería. Y por último estudié Magisterio de forma oficial en la Escuela de Magisterio de Almería que estaba en la Ctra. de Ronda.

Terminé Magisterio el 21 de Junio de 1967 y mi primer trabajo fue una sustitución en Huéchar. Me llamó doña María Luisa, que era la directora por entonces, y me dijo que la profesora de Huéchar estaría de baja maternal. Esta profesora era doña Loli, mujer de don

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