| EL ECO DE ALHAMA NÚMERO 26 | 20 DE SEPTIEMBRE DE 2008 |
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Recepción del Presidente del Congreso de los Diputados José Bono Martínez en el Ayuntamiento de Alhama
En torno a las seis de la tarde tuvo lugar la llegada del presidente de Congreso, José Bono Martínez, en la plaza del Ayuntamiento de Alhama. En la misma se encontraba el alcalde, Francisco Guil Cortés, con toda la Corporación municipal y el secretario del Ayuntamiento, Baldomero Cadenas Giralt. En primer lugar, en la propia plaza el alcalde le hizo entrega a José Bono del bastón de mando del Ayuntamiento, el mismo que regalara aquel alcalde coetáneo de Salmerón, Antonio Marín Cadenas, al Ayuntamiento, al tiempo que la banda de música de la asociación cultural "San Nicolás de Bari" de Alhama interpretaba la pieza musical Borosco. Tras saludar a todos los miembros de la Corporación municipal, José Bono entró en el Ayuntamiento para firmar en el libro de honor y dejar constancia escrita de su visita. Seguidamente, se dispusieron todos a trasladarse al frontón municipal donde se celebraría el pleno extraordinario del Ayuntamiento. Pleno Extraordinario de la Corporación Municipal de Alhama en el Frontón A las seis y media de la tarde, aproximadamente, llegaba el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, junto al alcalde de Alhama, Francisco Guil, a las puertas del frontón municipal, acompañados por el resto de la Corporación, un nutrido grupo de vecinos y la banda de música, provenientes todos de la plaza del Ayuntamiento. Llegaba el momento de celebrarse el pleno extraordinario. En la entrada del frontón José Bono fue saludado por las autoridades provinciales y autonómicas que allí le esperaban, además de encontrarse esperando ese momento otras autoridades de distintos ámbitos sociales aparte de alcaldes y concejales de varios pueblos de la provincia. En el interior del mismo se hallaban ya esperando la llegada más de mil personas, debiendo permanecer fuera del mismo por falta de espacio alrededor de medio millar. Había personas de todas las edades, hombre y mujeres, la mayoría vecinos de Alhama, que no faltaron a la cita para homenajear a su paisano universal. El frontón en su interior se encontraba acondicionado ya desde la mañana para la ocasión.
Uno de los momentos más emotivos de este acto fue la entrada de José Bono, acompañado por el alcalde y resto de autoridades al interior del frontón. Fueron unos minutos intensos entre los aplausos de los allí congregados, las notas musicales de Alcalde in music por la banda del pueblo y el movimiento de los periodistas y reporteros gráficos que no cesaban de realizar instantáneas de esos momentos en que tomaba asiento en la mesa presidencial José Bono, entre el alcalde y el secretario del Ayuntamiento de Alhama. Previamente a la celebración del pleno, tras los saludos protocolarios del alcalde y tras agradecer la presencia de José Bono esa tarde en Alhama para rendir homenaje al ilustre alhameño, aquél dio la palabra a los distintos representantes de las instituciones que habían formado parte de la Comisión del Centenario que, por orden de intervención, fueron el rector de la Universidad de Almería, Pedro Molina, el presidente de la Diputación Provincial, Juan Carlos Usero, y el delegado del Gobierno en Almería de la Junta de Andalucía, Manuel Recio.
Entre las palabras que pronunció Pedro Molina, cabe señalar la expresión de que Salmerón fue ejemplo por su ideario filosófico y político pero, fundamentalmente, por su trayectoria y compromiso vital a favor de las reforma pacífica y democrática de la sociedad española de su tiempo y de la modernización de España, en el deseo de romper exclusivismos y en la lucha por conseguir un estado de derecho democrático a través del voto, cuyas reglas de juego propiciaran el diálogo, la tolerancia y el entendimiento entre todos los españoles. Además, señaló que en todo ello fue pionero y precursor y que el sentido último del homenaje que se le ofrecía se encontraba en a recuperación de su pensamiento y de su obra, como defensor de aquellos principios. Juan Carlos Usero expresó en su intervención que Salmerón dejó un legado intelectual y ético que marcó a generaciones de españoles y que ha quedado grabado con letras de oro en la historia de España, por lo que era un orgullo para los almerienses contar entre los hijos de su historia con Nicolás Salmerón. Recordó también en sus palabras que Salmerón fue calificado como un apóstol de la democracia, con la satisfacción de que hoy afortunadamente disfrutamos de esa vieja aspiración que él tuvo.
Manuel Recio subrayó en sus palabras que la coherencia entre pensamiento y acción fue una constante a lo largo de la vida de Salmerón, por lo que constituye hoy un ejemplo de honestidad personal y una referencia imprescindible para quienes se dedican a la política y a la gestión pública. Llegó el momento de iniciarse el acto central más político de la jornada, era la celebración de un pleno extraordinario de la corporación municipal, con dos puntos en el orden del día. El primero era el reconocimiento de la figura de Nicolás Salmerón, con la intervención del portavoz del Grupo del Partido Popular, Cristóbal Rodríguez López, de la portavoz del Grupo del Partido Socialista, Sonia Gómez Lozano, y con la intervención del propio alcalde, Francisco Guil, quien lo hizo con un discurso largo, intenso y emotivo.
Cristóbal Rodríguez López tomó la palabra expresando su orgullo por haber nacido y vivir en el pueblo de Nicolás Salmerón, y señaló que la primera actuación que se hizo con motivo del Centenario fue cambiar el nombre de la avenida principal del municipio, pasando a llamarse Avenida Nicolás Salmerón y Alonso, y que su grupo inició las gestiones para conseguir que el día anterior llegara a toda España la figura de Salmerón a través del cupón de la ONCE.
Las palabras de Sonia Gómez Lozano, que fueron interrumpidas con aplausos, se centraron en resaltar que los alhameños de diferentes generaciones habían visto a Salmerón como signo de sabiduría y honestidad, y que habían guardado y transmitido a sus hijos el afán de saber y conocer el respeto y la tolerancia como normas de conducta. También resaltó que su Grupo se había sentido desde su fundación deudor de los principios salmeronianos, como el conocimiento por la educación o los valores cívicos de ciudadanía.
Por su parte, el alcalde, Francisco Guil Cortés, recordó en su discurso el sentir de la muerte de Salmerón por toda la nación española hacía justo 100 años, indicó que la conmemoración del Centenario había sido una excusa para profundizar en su pensamiento y en la pervivencia de su legado, hizo alusiones a las virtudes de Salmerón como político, como profesor, como krausista, como demócrata y como patriota, que buscó la regeneración y la modernización de España hasta el final de su vida, señaló que a los alhameños siempre se nos había transmitido una imagen de Salmerón como un hombre de principios e indicó que hoy más que nunca se hacía necesario volver a profundizar en aquellos valores e ideales que defendió Salmerón. Continuó expresando que Alhama podía estar orgullosa de ser su pueblo natal, que lo acompañó y apoyó desde su cuna hasta su muerte, y que hoy recogíamos el legado de nuestros antepasados y lo hacíamos presente con el compromiso de seguir difundiendo sus ideas entre las nuevas generaciones, y recordando, además, a aquellos que sufrieron persecución por ser seguidores del pensamiento republicano de Salmerón.
Su discurso terminó con un párrafo muy emotivo. Dijo: Para todos ellos y para nosotros Salmerón fue la grandeza de espíritu, fue la elevación del pensamiento, fue la virtud purificada. Para todos ellos y para nosotros Salmerón es Alhama y Alhama es Salmerón. Por ello, ciudadanos y ciudadanas, hoy podemos decir que Salmerón aquel 20 de septiembre de 1908, hace 100 años, pasó a la inmortalidad. Un fuerte aplauso se escuchó tras estas palabras.
El segundo punto del orden del día, que constituía otro de los momentos más emotivos de la tarde, era la entrega del Primer Premio "Nicolás Salmerón" al Congreso de los Diputados de España, que era recogido de manos de su presidente, José Bono Martínez. El alcalde en este punto indicó que Salmerón estaría orgulloso de que el primer premio que lleva su nombre se otorgara a la institución que en democracia representa al pueblo español y acabó con estas palabras que fueron muy aplaudidas: Sr. Presidente del Congreso de los Diputados, en nombre del Ayuntamiento de Alhama de Almería, le hago entrega del diploma correspondiente al premio Nicolás Salmerón y Alonso y también le impongo el escudo de la villa de Alhama. José Bono, tras recibir el premio, intervino con un discurso, interrumpido en más de una ocasión por los aplausos de los asistentes, en el que manifestó su satisfacción y agradecimiento al pueblo de Alhama y abundó en elogios hacia la figura de Nicolás Salmerón. Este acto, el más institucional de la tarde, culminó con la interpretación por banda de música de los himnos de Andalucía y de España. Por el interés que despertó la intervención de José Bono Martínez tras recibir el Primer Premio "Nicolás Salmerón", reproducimos íntegramente sus palabras.
Discurso del Presidente del Congreso de los Diputados, José Bono Martínez. "Sr. Alcalde, concejales, concejalas, autoridades, vecinos y vecinas de Alhama de Almería. En primer lugar, deseo trasladar muy sentidamente la gratitud que tengo con el homenaje que se hace a Don Nicolás Salmerón y Alonso y gratitud también por el reconocimiento de ese premio al Congreso de los Diputados y que he tenido el honor de recibir esta tarde. Mirad: hay actos a los que se acude por obligación, hay otros a los que se acude con disgusto disimulado. Cuando vuestro alcalde fue al Congreso de los Diputados hace unos meses y me pidió que pudiese venir en el día de hoy a Alhama de Almería, él puede dar fe que no lo dudé. Miré la agenda, vi que era sábado y pensé que mis cuatro hijos y mi mujer iban a poder estar satisfechos de que hoy dedicara este tiempo del fin de semana, más familiar, a honrar la memoria, en primer lugar, de quien fue un gran español, un gran presidente, un gran hombre y, si quieren, lo resumiría diciendo, aunque algunos piensan que no está de moda, Salmerón fue un patriota. Y he querido venir a gusto y espero que se me note que no estoy en un acto pronunciando unas palabras meramente rituales o protocolarias, sino que estoy en Alhama porque quiero, porque me gusta y porque creo que es obligación de los pueblos y de los políticos honrar y no olvidar a aquellos que estuvieron por encima de la media, muy por encima de la media. Probablemente Salmerón no pensara cuando hoy hace 100 años que muriese en Francia, probablemente no pensara después de una vida tan ajetreada, con exilio, con deportaciones, con menosprecios y con insultos, quizá no pensara, hoy, hace 100 años, que 100 años después su pueblo, Alhama de Almería, no lo iba a olvidar. Y es que, amigos y amigas, nadie muere del todo mientras no se le olvida. Y mientras haya nietos y biznietos y tataranietos de Salmerón, pero mientras haya un pueblo que cultive los valores que él enseñó en su cátedra, mientras haya gentes dispuestas a emocionarse en defensa de la justicia, de la igualdad, de la libertad y de España, Salmerón de algún modo seguirá vivo, porque nadie muere del todo mientras que no se le olvida. Por eso [Aplausos], por eso he venido con gusto. Gracias por la insignia de vuestro municipio que el alcalde me ha puesto en la chaqueta. Gracias a todos los concejales, a los de la mayoría del Partido Socialista y también a los del Partido Popular. Pero no es una referencia meramente protocolaria.
Amigas y amigos, nuestro país, nuestra libertad, nuestro bienestar, nuestro futuro valen más, mucho más que el Partido Socialista y el Partido Popular juntos. Y por eso es bueno que estén juntos los partidos para poner de manifiesto aquello en lo que se coincide y ¡Claro que hay cosas en las que se discrepa!. Es natural, es lógico, es obligado. Pero es muy importante también que los niños, en la escuela, como educación ética, cívica y social, sepan que sus representantes se enfadan y se enfrentan, pero que es mucho más lo que les une que lo que les separa. Hay veces que por torpeza ponemos más el énfasis en aquello que nos separa que en aquello que nos une. Pero mientras tengamos una patria tan libre como es España, mientras tengamos una Constitución que es de todos y que a todos incluye, mientras tengamos ideales por los que luchar, tendremos mucho más elementos de unión que de separación. Salmerón dedicó gran parte de su actividad [Aplausos], Salmerón dedicó gran parte de su actividad a poner en común aquello que unía a los españoles. Él habló de España sin hacer referencia, como algunos, que a veces por no mentar a España hablan del Estado sin saber ni lo que es España ni lo que es Estado. Pero Salmerón tuvo una idea precisa de que el bienestar de los españoles era lo más importante para España. España no son los montes, ni los ríos ni los mares, sobre todo España es los españoles y las españolas. Un filósofo italiano, Antonio Gramsci, escribió una carta a su hijo desde la cárcel y le decía: hijo, la historia de un pueblo es lo que le pasa a la gente, a cuanta más gente mejor. A veces hemos creído que la historia de España era lo que le pasaba a un rey o a un general o a un ministro o a un grupo de gentes principales. No. La historia de Alhama de Almería y de Andalucía y de España no es la historia de lo que le haya ocurrido a una clase dirigente, es la historia de la gente, incluso, como decía Gramsci, de cuanta más gente mejor, de esa gente que no tiene nombres en las calles, que no es principal ni famosa, de esas gentes que construyeron las carreteras, de esas gentes que hicieron los ferrocarriles, de esas gentes que votaron en la Primera y en la Segunda Repúblicas y que votaron la Constitución y que muchos ya no están aquí para votar y que se nos fueron. La historia de España es la historia de la gente.
Pero hay gente en España, ha habido gente en España que ha representado individualmente a la historia. No se puede decir eso de todos los jefes de Estado que hemos tenido. Por supuesto que no. Algunos casos son evidentemente al revés. Hemos tenido nefastos reyes, nefastos presidentes de la República, pero hemos tenido hombres sublimes, que han sabido en poco tiempo, en efímero tiempo de mandato, representara todo su pueblo, y uno de ellos es un hombre de Alhama de Almería, Salmerón. En el tiempo en que estuvo como presidente de la República y como presidente del Congreso tuvo tiempo de decir, por ejemplo, que la fuerza no era la razón del avance de los pueblos. Decirlo esto hoy, a principios del siglo XXI, es más fácil que decirlo a finales del siglo XIX. Le costó el exilio decir que la fuerza era la razón de los animales, pero que los valores de la igualdad y la justicia eran aquellos que debían presidir la convivencia en España. De Salmerón pudo escribirse en su tumba -así lo deseó su esposa- que había dimitido por no firmar una pena de muerte. Sí, yo comprendo que esto puede interpretarse de muchos modos, pero yo lo interpreto de un modo. Y es que, detrás del político, detrás del catedrático, detrás del hombre combativo, había -corno dijera Machado- un hombre bueno en el mejor sentido de la palabra. Y los pueblos se hacen grandes y se hacen buenos por sus acciones. Y esta tarde del sábado, cien años después de que muriera Salmerón, su pueblo, Alhama de Almería, se hace grande sabiendo que no pierde el tiempo, que no malgasta el tiempo, dedicando en vez de a ver la televisión, bueno, la televisión o cualquier programa basura de los que a veces son tan llenos de audiencia, no pierde el tiempo un pueblo cuando honra a aquellos que le representaron tan dignamente, cuando le reviven. Porque, como digo, ya sé que en la tercera fila -me ha dicho el alcalde- a la derecha están sus familiares, sus nietos y sus tataranietos, pero hoy a Salmerón se le revive por la voluntad de la Corporación, por la voluntad del pueblo que está llenando este frontón donde -me decía el alcalde al empezar el acto- él también venía a hacer deporte. Y está bien que revivamos a nuestra mejor gente. Y nada más. No os canso. España no tiene por costumbre honrar a los que se fueron excepto el día del entierro. Se ha dicho que somos un país de grandes entierros, pero también olvidadizos. Y es bueno que los niños de Alhama y de Andalucía y de España, además de sabe cómo se llama el diputado de turno o el senador de turno, si es que lo saben, sepan que en nuestra historia ha habido hombres de la talla moral de Salmerón y que en la galería de retratos del Congreso de los Diputados, donde está su retrato y este busto que allí llevaré por deseo de vuestra Corporación, pueda ser reflejo y espejo para quien nos visite. Una última cuestión. El alcalde
me ha entregado también un sobre que es la parte económica
del premio. El Congreso de los Diputados es una institución
que aprueba los presupuestos y, con austeridad este año hemos
querido, pero no necesita premios en metálico. Por ello,
se lo devuelvo al alcalde y le pido que este dinero que se encuentra
en este sobre se dedique, del mejor modo posible y con la mejor
intención, a cultivar los valores de igualdad, de justicia
y de patriotismo que encarnó Salmerón.
La procesión cívica Una vez concluido el pleno extraordinario del Ayuntamiento de Alhama en el frontón municipal, pasadas las ocho de la tarde, se puso en marcha la procesión cívica encabezada por José Bono, el alcalde con los concejales de la Corporación municipal de Alhama y otras autoridades que asistieron al acto. Le seguían todas las personas, la mayoría vecinos de Alhama, que se encontraban dentro y también fuera del frontón. Cerraba la comitiva la banda de música de de Alhama, que interpretó los pasodobles Borosco, Xabia, Orgía dorada y Ganando Barlovento. Al paso de la comitiva por la calle principal de Alhama que une el frontón con la casa de Nicolás Salmerón en el Paseo -recorrido de unos 800 metros-, muchas personas aprovecharon la ocasión para asomarse a balcones y terrados para saludar a José Bono y manifestar su admiración por Nicolás Salmerón, gesto que nos recuerda aquellos recibimientos que vivió Salmerón cada vez que cruzaba la localidad vecina de Gádor cuando llegaba en tren en sus viajes a Alhama a principios del siglo XX. La procesión transcurrió con paso ligero, como si nadie quisiera perderse algo importante que quedaba por ver y escuchar. Quedaba por asistir a los momentos más emotivos del día frente a la casa de Nicolás Salmerón y junto al monumento que encumbra su busto, erigido en su memoria el 20 de diciembre de 1928. Ésta culminó con la entrada a la casa de las autoridades más significativas y con el agrupamiento del resto de los participantes frente a la fachada principal de la casa, que se mezclaron con otro numeroso grupo que ya se encontraba allí a la espera del homenaje más íntimo. Esta procesión nos recordaba aquellas otras que se vivieron en Alhama con anterioridad, la que se llevó a cabo en el homenaje que el 20 de septiembre de 1931 se le tributó, y aquella otra, más reciente, que tuvo lugar el 4 de abril del 2003 con motivo del centenario de la constitución de Unión Republicana en torno a la jefatura de Nicolás Salmerón, iniciándose en esta última ocasión el recorrido desde el propio Ayuntamiento y siendo encabezada por la banda de música y varias banderas.
Discursos en homenaje a Nicolás Salmerón desde el balcón de su casa >>>> |
