En la primavera de 1906 los técnicos redactores visitaron Alhama de Almería, realizando una inspección de la zona en la que determinaron la necesidad de acometer una serie de sondeos de prospección del terreno. Los sondeos ejecutados por la Sociedad Española de Sondeos finalizaron en junio de 1906, dando lugar al informe geológico favorable de Lucas Mallada para la disposición a la entrada de la angostura del Pasillo de la presa y sobre la impermeabilidad del vaso del pantano. Tras las dos malas campañas agrícolas de 1906 y 1907, desde un punto de vista financiero, el proyecto fue presentado por José Cebada a la Comisión Gestora en agosto de 1908.
La necesidad de afrontar las labores agrícolas de la última parte del año 1908, ocasionó que hasta el 10 de enero de 1909 no pudiera convocarse la Junta General de accionistas de la sociedad, que quedó finalmente constituida como sociedad civil particular, mediante escritura pública otorgada por el notario Pedro de Orta y Tortosa el 25 de julio 1909, bajo el nombre de "Sociedad del Pantano del Pasillo de Alhama de Almería". El capital social de la empresa quedó fijado en 12.000 ptas., repartido en 1.000 acciones a razón de 12 pesetas la acción.
Acción número 484 de la Sociedad del Pantano del Pasillo de Alhama de Almería a favor de D. Juan Muñoz Andujar. Colección particular de Doña Maria Muñoz
La distribución de las acciones y la constitución del accionariado de la sociedad es especialmente significativa, ya que contaba con un total de 429 accionistas, acumulándose como máximo en un propietario (Gabriel Tortosa Artés) un total de 18 acciones, y siendo mayoritaria la posesión por accionistas de una o dos acciones. El 98% de los accionistas eran vecinos de Alhama, formando parte también de la sociedad: 2 residentes en Almería, 3 en Santa Fe de Mondújar, 1 en Huécija, 1 en Alhabia y 1 en La Unión (provincia de Murcia). Del análisis detallado del accionariado subyace la idea de que la intención de los precursores de la iniciativa fue claramente contar con la participación en la empresa del conjunto de la sociedad de Alhama de la época, dejando de un lado la posibilidad de especular con la venta de las aguas, ya que en los estatutos se recogía que las aguas serían explotadas por la sociedad y se dedicarían exclusivamente al riego de las tierras de sus accionistas, siendo posible únicamente la permuta y cesión entre socios, previa fijación del precio de cesión por parte de la Junta Directiva. Sería también competencia de la Junta el reparto de las aguas en febrero de cada año y la confección del cuadro de distribución de riegos.
"... los alhameños han constituido, con gran entusiasmo, una Junta Gestora, ...y por medio de acciones repartidas y divididas entre todos los vecinos del pueblo, han conseguido reunir fondos suficientes para hacer los estudios del anteproyecto del Pantano,... "
La primera Junta Directiva de la sociedad estuvo presidida por Manuel Burgos Martínez, sumándose Emilio López Gómez y Cecilio Artés Casado a los miembros elegidos en octubre de 1905.
En enero de 1909 se aprobaron los gastos acumulados hasta la fecha, correspondientes a los sondeos practicados y al informe geológico (4.249,30 ptas), al proyecto del Pantano (12.644,95 ptas) y a otros gastos ocasionados por las gestiones efectuadas por la Comisión Gestora (439,45 ptas).