Manuel Beas Jiménez
PROFESOR DE EDUCACIÓN FÍSICA I.E.S. "CERRO MILANO"
Entre los numerosos parajes naturales con los que cuenta el término municipal de Alhama de Almería, se encuentra un espectacular rincón, lleno de increíbles formaciones, producto del implacable paso del tiempo y la constante acción de los agentes geológicos externos. Se trata del barranco del Pasillo, nombre con el que aparece en la cartografía, y que seguramente les será menos familiar que el de barranco de "Los Mármoles", apelativo con el que lo conocen la mayoría de los alhameños, o barrancode "Los Caracoles" como lo conocen otros pocos.
Es probable que muchos de los lectores conozcan este paraje e incluso muchos de ellos lo habrán visitado en alguna ocasión y disfrutado de las increíbles vistas que ofrece, pero otros muchos desconocen la existencia, a tan sólo unos minutos del pueblo, de tan asombroso entorno natural, dentro del cual existe una formación geológica catalogada por la Junta de Andalucía como bien de interés geológico.
Durante muchos años en el instituto de enseñanza secundaria de la localidad, el IES "Cerro Milano", conscientes de los numerosos recursos pedagógicos que ofrece el medio natural y de las diversas actividades físicas que en él se pueden desarrollar, se han aprovechado los diferentes entornos naturales para la práctica docente de actividades físicas en el medio natural (AFMN). De esta forma la práctica de actividades como el senderismo, juegos de rastreo, orientación han pasado a formar parte de las actividades que, el alumnado del centro, puede practicar en este entorno natural existente en las inmediaciones del centro educativo.
Una de las rutas que habitualmente se realiza es la que discurre a lo largo de toda la acequia de Gatuna y que nos lleva hasta la parte baja del barranco, justo antes de su ensanche donde se convierte en la rambla de Alhama. Esta ruta nos permite acceder al tramo final del barranco y contemplar las enormes paredes que se alzan a ambos lados, sobre nuestras cabezas, así como descubrir el motivo de uno de los nombres con que se conoce al barranco.