La década decimonónica de los ochenta será pródiga en acontecimientos
importantes para la Provincia. Uno de estos acontecimientos
será, sin duda, la gestación de la construcción del ferrocarril,
que vendría a finalizar con el secular aislamiento de las
tierras almerienses, aunque habrá que esperar hasta 1895
para ver concluida esta aspiración tan demandada.
En 1882, el Presidente de la Diputación, Justo Tovar ofreció
como garantía para la construcción de la línea de ferrocarril,
el 6% de las rentas provinciales y 21 millones de pesetas.
No será ajena Alhama como el resto de municipios que vertebra
el Andarax, a los avatares que acompañarán el trazado de
la línea férrea que debía acabar con el aislamiento secular
(tanto interior como exterior) de nuestra provincia. El
30 de mayo de 1870 se había firmado el acta de constitución
de la compañía de los Ferrocarriles Andaluces a los que
años más tarde le surgirá como competidor la Compañía de
Hierro del Sur de España, cuyo objetivo era el transporte
de mineral desde Sierra Morena hasta Almería.
Volviendo al proyecto de 1870, en 1877 se materializa un
trazado de ferrocarril, que de haberse llevado a cabo hubiese
cambiado toda la proyección socioeconómica de los pueblos
del valle alto y medio del Andarax. Partía la línea de Linares
y Iras atravesar las tierras jiennenses en su camino hacia
el sur, se adentraba en las tierras granadinas de la comarca
de Baza y el marquesado del Cenete, para pasar a Almería
por Fiñana y Abrucena y ganada la ladera sur de Sierra Nevada
por Canjáyar seguir el camino del valle del río y por Alhama
y Huércal terminar en Almería (3).
En 1883, las Cortes generales con el Gobierno Sagasta,
aprobaron la Ley de Policía de Imprenta (26 de julio) que
ha regulado la libertada de expresión en España hasta su
eliminación en el franquismo. Ese mismo año y gracias a
las gestiones realizadas en Madrid por don Joaquín Ramón
García se consiguió del Marqués de Sardoal una subvención
de 31.200 pesetas para el ferrocarril Linares-Almería. Se
debe destacar el apoyo al proyecto prestado por don Carlos
Navarro Rodrigo que como diputado en Cortes y al año siguiente
ya como Ministro de Fomento, otorgó dos subvenciones al
proyecto ferroviario y al puerto además de ser el verdadero
artífice de la creación del Instituto de 2" enseñanza, la
Escuela Normal de Magisterio y la de Artes y Oficios, siendo
nombrado en agradecimiento hijo adoptivo de Almería (4).
El 16 de junio de 1889 se firmó ante el notario madrileño
don José García Lastra el acta de constitución de la concesión
de la línea Linares-Almería de la Compañía de los Caminos
de Hierro del sur de España, lo que suponía el pistoletazo
de salida del futuro tendido ferroviario de Almería.
Finalmente, como sabemos, el trazado del ferrocarril varió
su recorrido dejando el río Andarax en el olvido, pues si
bien entraba en nuestra provincia por Fiñana, continuaba
hacia Ocaña y las tierras de Gérgal, Santa Fe, Gádor, Huércal
y Almería y no quedó finalizado como hemos apuntado hasta
1895.
Será también 1883 cuando se produzca la confección de un
nuevo censo electoral en los municipios españoles necesario
para la celebración de los comicios municipales. En el documento
se debían recoger por orden alfabético todos los vecinos
(varones) con derecho a sufragio y en cuya relación se hacía
expresa mención a los "elegibles" y "no elegibles".
El censo de vecinos de Alhama (5) estaba compuesto
por 517 vecinos mayores de 25 años, de los cuales 389 gozaban
de la posibilidad de ser elegibles y 113 no tenían tal derecho.
A los anteriores había que añadir los especificados como
"Clases Activas", el cura propio (don Mariano Maeso y Bermejo)
y los dos coadjutores (don Luis Ordoño López y Tomás de
Arcos Ordoño).